sábado, 24 de diciembre de 2011

Jornaditas VII

Día Séptimo (24 dic.)

Oración para todos los días:

San José y Santa María, queremos peregrinar con vosotros desde vuestra casita de
Nazaret a Belén, la casa del pan. Queremos gozar de vuestra compañía. Os queremos seguir
como enamorados que caminan buscando vuestras huellas; como sedientos necesitados de
llegar a la fuente de agua viva que lleváis con vosotros.

La soledad del alma solo se llena con la presencia del que ha de venir. Vosotros sois
los portadores del esperado de las naciones. Cada aurora nos habla del sol que viene de lo
alto. Decidnos: ¿cuánto tardará en brillar su luz sobre la faz de la Iglesia y sobre nosotros, sus
hijos? Que la aurora se convierta en mediodía. Que nuestra fe se haga visión arrodillada en
Belén.

Punto 7º.- “Alégrate, María, llena de gracia, el Seor está contigo, bendita tú entre las

mujeres”. ¿Qué pensabas, María, en aquellas horas anteriores a tu parto virginal? Se acerca ya
el momento, la Noche Santa, que durante todos los siglos los hombres festejarán, aun aquellos
que no saben bien lo que festejan. Porque tu Hijo viene para salvarlos a todos, no solo a su
Pueblo de Israel, sino que su Salvación alcanza a todos los confines de la tierra. Alégrate,
María, porque esta noche nos darás a luz a Jesús, y a ti te llamarán Madre de Dios todas las
generaciones.

Ant.- Oh Emmanuel, Rey y Legislador nuestro, esperanza de las naciones y Salvador de
los pueblos, ven a salvarnos, Señor Dios Nuestro.

V/ Cielos, enviad vuestro rocío.
R/ Ábrase la tierra y germine al Salvador..



Oremos. Apresúrate, Señor Jesús, y no tardes, para que tu venida consuele y fortalezca a los
que esperan todo de tu amor. Tú que vives y reinas por los siglos de siglos. Amén.


Campanilleros


Esta noche nacerá en la tierra,
el que es Dios Eterno y Niño en Belén (bis)
es el Hijo de Dios y María
y Ella nos lo entrega, hoy como Bebé.
Hoy como Bebé, hoy como Bebé.
¡Qué pequeño se muestra esta noche
y cielos y tierra se miran en El!


Nunca pasan tan lentas las horas,
como en este día que amanece ya (bis)
Será al filo de la medianoche
cuando, Virgen Niña, tú lo alumbrarás.
Tú lo alumbrarás, tú lo alumbrarás.
Y en tus brazos de tierna doncella,
el Dios de los cielos, se recostará.


TRASLADO DEL NIÑO AL PORTAL




Esperaba, esperaba, la Niña de Nazaret,
esperaba, esperaba y no conocía qué,
sabía que su Dueño, siempre era fiel,
y por eso esperaba, esperaba con fe.

Dios que a la puerta llama, ¿quién abrirá?
Todos los hombres callan, dormidos ya.
La Virgen vigilante, despierta está,
puso aceite en la lámpara
que brilla más.

Esperaba, esperaba...
Dios que a los hombres dice: quiero venir
Los hombres que contestan: “no hay sitio aquí.”
Pero la Virgen Niña, responde así:
“Que esa palabra tuya, se cumpla en mí.”

Esperaba, esperaba...
Cuando mi Niño venga, ¿qué haré con El?
El se me ha dado todo, y yo a El también.
Quiero darlo a los hombres, para ellos es;
salgamos de camino hacia Belén.

¡¡FELIZ NAVIDAD!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario